Protección contra el cáncer
El brócoli posee una fuente rica en compuestos fitoquímicos, entre ellos los glucosinolatos, que al ser metabolizados en el organismo se convierten en indol-3-carbinol (I3C) y sulforafano. Estos compuestos han mostrado propiedades anticancerígenas al interferir en el proceso implicado con el crecimiento tumoral y al promover la apoptosis, o muerte celular programada. Además, el brócoli, contiene antioxidantes como la vitamina C y el beta-caroteno, lo que ayuda a proteger las células del daño oxidativo, relacionado con el desarrollo de ciertos tipos de cáncer cómo el de colon, pulmón o mama.
Control de la diabetes
El control efectivo de la diabetes supone llevar una gestión cuidadosa de la dieta y, el brócoli puede desempeñar un papel beneficioso en este proceso. Su excelente fuente de fibra ayuda a regular los niveles de azúcar en la sangre ya que ralentiza la absorción de la glucosa. Además, el brócoli posee un bajo índice glucémico, lo que significa que no causa aumentos rápidos en los niveles de azúcar en la sangre.
Beneficios cardiovasculares
El brócoli presenta beneficios significativos para la salud cardiovascular debido a su contenido en fibra, la vitamina C y los compuestos antiinflamatorios del sulforafano. Su aporte de potasio ayuda a regular la presión arterial, mientras que el ácido fólico contribuye a reducir los niveles de homocisteína en la sangre, asociada con un menor riesgo de enfermedad cardiovascular.
Salud del sistema digestivo
Gracias a su contenido en fibra, compuestos antiinflamatorios y prebióticos que favorecen la salud microbiótica, el brócoli beneficia en gran medida la regularidad intestinal. Además gracias a los antioxidantes y nutrientes puede reducir el riesgo de enfermedades intestinales y promover un sistema digestivo saludable.